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Huerto Urbano

Huertos urbanos en Barcelona

Conocida por su preciosa arquitectura, como la famosísima Sagrada Familia, el Parque Güell, el Palacio de la Música catalana, la casa Vicens o el Hospital de la Santa Cruz y San Pablo, se podría decir que es una urbe de cemento, pero también tiene hermosos parques y jardines como el Parque Zoológico de Barcelona o el Parque de la Ciudadela, en el que encontrarás el edificio del Parlamento y el Parque del Laberinto de Horta, lleno de setos que dan la forma de laberinto.

Esta ciudad, que cuenta con numerosos monumentos nombrados como Patrimonio de la Humanidad, comprende a la perfección el valor social, ecológico y cultural que conlleva la implementación de huertos urbanos. Por ello, cada vez más común encontrarlos a lo largo y ancho de la ciudad.

Capital de Cataluña, es una ciudad cosmopolita llena de vida muy implicada con el cambio climático, por lo que ya se han empezado a implementar políticas de conservación del Medio Ambiente.

El Ayuntamiento entiende que las generaciones mayores son las que tienen más dificultad para adaptarse a llevar un estilo de vida sostenible, y por ello, la mayoría de los huertos urbanos que existen en esta ciudad están enfocados como programas para personas mayores de 65 años.

Pero esto no quiere decir que si eres una persona joven no podrás participar. Al contrario, siempre están buscando voluntarios que ayuden con todo tipo de tareas e imparta clases sobre alimentación ecológica, cuidado ambiental, reducción de la huella ecológica y mucho más.

Índice

    Los mejores huertos urbanos de Barcelona

    Si estás en búsqueda de los huertos urbanos más icónicos de la ciudad, aquí tienes nuestro top 5:

    • L’Hort de l’Avi: fue el primer huerto que empezó a funcionar en la ciudad, específicamente en 1986 en la parte forestal de Park Güell, gracias a la petición de un grupo vecinal. Se considera el pionero, ya que es ejemplo de cómo un grupo de ancianos lograron hacer desde cero todo el huerto e impartieron clases sobre educación ambiental.
    • Can Mestres: es el primero de los muchos huertos urbanos en Barcelona promovido por el Ayuntamiento. Tiene varios objetivos, pero el principal es que personas de la tercera edad, discapacitados y voluntarios se unan en una actividad al aire libre. Este huerto tiene la particularidad de que incluso tiene animales en jaulas para dar toda la sensación de granja.
    • Hort Urbà Parc de la Trinitat: El huerto urbano del Parque de la Trinidad es un precioso lugar que reserva un área para el cultivo sostenible. El huerto se encuentra ubicado junto al Monasterio de Pedralbes.
    • Hort Urbà de Turull: situado en el bosque de Turull, antigua finca privada, se trata de una iniciativa con un aula ambiental, huerto ecológico con sistema de riego manual, jardín de mariposas y hotel de insectos. Es un espacio perfecto para conectarse con la naturaleza, aprender de ella y entender la importancia sobre llevar un estilo de vida sostenible.
    • Huerto urbano Sant Pau del Camp: los jardines que rodean el monasterio románico de Sant Pau del Camp prestan un poco de su terreno para uno de los huertos urbanos de Barcelona promovido por el Ayuntamiento para el programa de personas mayores de 65 años.

     

    ¿Qué podemos encontrar en un huerto urbano?

    Se trata de un espacio de terreno que se dispone en la ciudad para la siembra, cultivo y cosecha de hortalizas, flores, hierbas aromáticas y/o plantas medicinales.

    Aunque la idea nació en la Segunda Guerra Mundial, ya que no era factible importar los alimentos desde el campo, hoy en día es una iniciativa muy utilizada para crear una economía circular, un estilo de vida sostenible y lograr integrar a las comunidades a través de charlas, cultivos y actividades ecológicas que giren entorno al cuidado ambiental.

    En Barcelona, los huertos urbanos son parecidos a los de la mayoría de las ciudades españolas, con la particularidad que en todos encontrarás adultos mayores y personas discapacitadas participando en el proyecto. Toda la cosecha se reparte entre los participantes, voluntarios o se dona a la caridad.

    Los principales cultivos incluyen patatas, acelgas, berenjenas, cebollas, ajos, alcachofas, lechugas y algunas legumbres.

    Toda la cosecha se reparte entre los participantes y voluntarios o se dona a la caridad.