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Huerto Urbano

¿Un huerto urbano en el balcón?

¿Te has planteado alguna vez crear un huerto urbano con algunas hortalizas y plantas aromáticas? Cultivar en el balcón de la casa es una tendencia que en los últimos años se ha puesto muy de moda en ambientes urbanos.

La necesidad de conectarse con la naturaleza y sentirla cerca está al orden del día; ver crecer las plantas del huerto y recolectar sus frutos proporciona una gran satisfacción. Y por eso, cada vez más personas deciden crear su propio huerto en casa, por pequeño que sea, y buscan sus propios espacios: la terraza del piso, el balcón, el patio o un lugar cerca de la ventana.

Ahora te toca a ti, ¿te animas a crear un huerto en ese espacio que no usas? ¿sabes cómo empezar? Aquí te vamos a dar unas claves para poder empezar desde cero.

Índice

    1. Fíjate en la orientación:

    La mejor disposición de una terraza o balcón es la que se sitúa en el este u oeste. Si tu balcón está orientado hacia el norte, recibirá la mayor parte del día mucha sombra, pero si está orientado hacia el sur, recibirá mucho calor en verano, lo que no es malo, pero te obligará a estar más atento a los riegos.

    La terraza debe disponer de sol directo durante al menos 6 horas al día, para que las plantas se desarrollen perfectamente y que puedan florecer y dar frutos. Si tu terraza no cumple, las plantas se quedarán raquíticas y no podrán florecer con normalidad.

    2. ¿Hay instalación de agua?

    Es conveniente que en la terraza haya una toma de agua para poder instalar riego automático o simplemente rellenar la regadera.

    En realidad, la regadera se puede rellenar en cualquier punto de la casa, es más fácil si se hace in situ, pero no imposible. Lo que sí es más difícil es instalar un riego automático si no hay punto de agua en la terraza. En los centros de jardinería se encuentran kits de riego para terrazas, que son muy útiles porque no tienes que estar tan pendiente del riego de tus plantas. Eso sí, no creas que con esto te vas a desentender del riego, aun así vas a necesitar estar atento a si se ha regado bien o si tus plantas están encharcadas. No regar en exceso es la clave para evitar la podredumbre de los cuellos y las raíces de las plantas.

    3. ¿Cuál es la frecuencia de riego?

    El riego es un punto muy importante para seguir de cerca porque es muy variable. No tienes que tener la misma frecuencia de riego en invierno que en verano, ni un día que ha llovido muchísimo que otro que no llovió nada. Por ello debes estar atento al tiempo. En días calurosos de verano, las plantas van a necesitar un riego diario, mientras que en invierno uno cada cinco días es suficiente. Para comprobar si las plantas necesitan un riego solo tienes que tocar el sustrato: si se quedan restos pegados en el dedo es que aun la tierra está mojada, pero si no sucede esto, debes regar.

    4. ¿Qué tipo de recipientes vas a utilizar?

    Existen muchísimos recipientes para poder cultivar. Busca el mejor recipiente que se pueda adecuar al tamaño y dimensiones de tu terraza. Si tienes un balcón pequeño bien orientado utiliza jardineras para colgar en la barandilla: hazlo por dentro, así evitarás posibles caídas de los recipientes. Si la terraza es pequeña y no tienes mucho hueco unos cuantos tiestos bien situados te pueden servir.

    Lo que si es cierto es que las mesas de cultivo se están poniendo muy de moda. Muchos modelos urbanos de mesas de cultivo se han diseñado para los pequeños espacios de los balcones y tiene muchos beneficios: no tienes que agacharte al estar trabajando, se pueden mover, se almacenan fácilmente y muchos de ellos tienen un diseño muy bonito.

    5. El sustrato, el alma del huerto.

    Hay que tener en cuenta que el sustrato es la zona donde se desarrolla la raíz, parte importante de la planta porque es el sitio de donde absorben los nutrientes y el agua necesaria para crecer. Un buen sustrato, con buenos nutrientes, hace que la planta cultivada tenga buena salud y nos dé unos buenos frutos. Por eso para los recipientes hay que utilizar 60% fibra de coco y 40% humus de lombriz. Lo que más va ayudar, a parte de los nutrientes que contenga el sustrato, son los microorganismos que fijen nitrógeno, por eso cada cierto tiempo es bueno utilizar Humus Líquido de Nostoc, un concentrado con todos los microorganismos que aporta el humus de lombriz. Con ello conseguimos que se queden bien instalados en el sustrato y nos aporten todos los beneficios.

    6. Planifica tu siembra.

    Aquí viene la parte importante de tu huerto: las plantas que van a crecer y que en un futuro podrás recolectar. Una buena planificación de las especies que vas a sembrar y cómo lo vas a hacer es la clave del éxito en tu terraza.

    ¿Sembrar o plantar?

    Aquí se presenta el dilema: semillas o plantones. Para obtener mejores plantas en tu huerto te aconsejamos que lo hagas a partir de semillas. Puedes empezar con semillero o si cultivas en macetas o jardineras puedes sembrar incluso en estos recipientes. Las plantas que nazcan estarán adaptadas al entorno de tu huerto y prosperarán más rápido.

    Si se te ha pasado la época de siembra, puedes recurrir a los plantones que venden en los centros de jardinería, sabiendo que necesitan un tiempo para poder aclimatarse a los riegos, la insolación y el microclima de tu huerto. Además son muchísimo más caros.

    Empieza con especies que sean fáciles de cultivar y que no tengan muchos problemas de plagas. Te recomendamos:

    • Tomates cherry, que crecen bien en cualquier maceta y dan bastantes frutos.
    • Lechugas son plantas que crecen rápido y en cualquier momento del año siempre que no haya heladas.
    • Plantas aromáticas mediterráneas como el romero, el tomillo o la salvia. Son plantas que crecen bien y no necesitan muchos riegos ni cuidados.
    • Perejil que es una planta que necesita poco riego y se propaga con facilidad y es muy útil en la cocina.
    • También se encuentra en esta lista la hierbabuena, una planta con tallos subterráneos que le permite propagarse con mucha facilidad. No es propensa a tener plagas y produce buena cantidad de tallos.

    7. Las asociaciones de diferentes plantas son muy beneficiosas.

    Las asociaciones están pensadas para que puedas aprovechar mucho mejor el espacio, y por otra parte para crear asociaciones que beneficien a las plantas, mejorando su rendimiento.

    ¿Cómo asocio las plantas en las macetas?

    • Asocia plantas con diferente porte: plantas que se desarrollen en vertical como cebollinos o ajos con plantas con porte horizontal, como calabacines o lechugas.
    • Junta verduras de crecimiento rápido como rabanitos o lechugas con otros más lentos como las zanahoria o las coles. Cada una tiene un ciclo de desarrollo y producción diferentes y por lo tanto el cultivo mantendrá ocupado un espacio del huerto durante un periodo de tiempo determinado.
    • No dudes en introducir plantas de flor junto con tus plantas hortícolas. Darán una nota de color, algunas se pueden comer e incluso puede aportar propiedades: ahuyentan plagas y evitan enfermedades como los tagetes con la col.
    • Mezcla hortalizas de hojas con hortalizas de raíz. Por ejemplo, planta rúcula junto con zanahorias o rabanitos.
    • Aprovecha las relaciones protectoras entre las plantas como tomillo con coles para repeler el gusano y la mosca, la tomatera con el hinojo para repeler la polilla y los nematodos; introduce también la albahaca que repele moscas y mosquitos.

    8. Abona siempre con productos ecológicos.

    En tu pequeño huerto de terraza tienes que mantener tus plantas bien nutridas. Lo mejor es utilizar fertilizantes biológicos. Si utilizas los fertilizantes químicos que utiliza la agricultura convencional, estarás cultivando plantas de la misma manera que cualquiera que puedas encontrar en un supermercado. Lo que sucede con estos tipos de fertilizantes químicos es que provocan desórdenes nutricionales en las plantas, y como consecuencia favorece el ataque de enfermedades y plagas.

    Los fertilizantes ecológicos aportan microorganismos beneficiosos que aseguran que las plantas estén bien nutridas y como resultado favorece que tengan un sistema inmunitario fuerte para que estén sanas.

    ¿Qué fertilizante ecológico utilizar?

    En primer lugar hay que utilizar Bio-NPK, un biofertilizante de Nostoc que te asegura que las plantas dispondrán de los nutrientes necesarios en cualquier momento de su ciclo biológico. Contiene microrganismos que ayudan a fijar el nitrógeno de la atmósfera, moviliza el fósforo y el potasio del suelo y lo más importante de todo, aumenta la tolerancia de las plantas a las condiciones de sequía.

    ¿Cómo utilizar el fertilizante ecológico?

    Muy simple, disuelve el producto en agua al 2% (20 gramos del producto por cada litro de agua) y apórtalo a tus plantas una vez al mes.

    Para que los microorganismos que aportamos puedan desarrollarse bien en el sustrato intenta regar con agua que esté libre de cloro. Si utilizas agua del grifo déjala reposar durante 48 horas al aire libre, con este método habrás eliminado la mayor parte del cloro que se encuentra en el agua.

    9. ¡Observa tus plantas, no las pierdas de vista!

    Lo importante en tu huerto urbano es revisar cómo se desarrollan tus plantas:

    • En primer lugar, fíjate la humedad que tiene la tierra. Si está muy seca o está muy regada y de este modo regular los riegos.
    • Después fíjate en el crecimiento de las plantas: hay algunas plantas, como los tomates, que necesitan una guía para estar erguidas y además precisan que las vayan conduciendo para que puedan producir bien.
    • Por último, échale un vistazo a las hojas y a los tallos en busca de insectos que puedan ser plagas o enfermedades. De este modo te aseguras que tus plantas están sanas y podrás poner remedio a cualquier problema que vaya surgiendo sin que se convierta en una catástrofe.